China, siglo XIX. La joven emperatriz Orquídea debe gobernar un país en declive y un palacio marcado por las intrigas.
En una época convulsa de guerras y levantamientos populares, una sola mujer, la emperatriz Orquídea, una figura emblemática que encarna el ocaso de una dinastía legendaria, debe mantener en pie un imperio en pleno declive.
Una mujer que tiene que dedicar devotamente su vida a mantener la estabilidad de la nación olvidando su propia felicidad; una emperatriz que tiene que sortear todo tipo de obstáculos: las intrigas palaciegas, la muerte del joven heredero, las revueltas... y el amor prohibido hacia un general del ejército.
La última emperatriz es un vívido relato que convierte al lector en algo más que un mero espectador de una de las épocas más apasionantes de China, la etapa final del imperio, y que le permite profundizar en la figura de una mujer -madre, amante y emperatriz- hecha a sí mismacon los mimbres de la dureza y la ternura, de la resignación y la resistencia, en una época y un país condenados.
Reseña:
«Una escritora apasionada y sin temores.»
The New York Times