Autor:
JUAN M. TAVERAS
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Páginas: 153
Descripción:
En su conjunto, LOS CUADERNOS DE ORANYAN, revelan la odisea de negros y judíos durante los últimos dos mil años. El presente libro, el cuarto de la serie, se centra en la narrativa del propio Oranyán, un esclavo africano que nació y vivió en la España trágica que experimentó, durante un periodo de la edad media, no solo el sufrimiento producto de la peste negra, sino la mayor decadencia moral experimentada por la Europa de entonces que perdió, a causa de la gran pandemia, todo el sentido de humanismo que diferencia al hombre de las bestias. La experiencia vivida durante aquella era obscura y sin esperanza, resultó tan traumática, tan contraria a la solidaridad humana y al comportamiento del hombre supuestamente conquistado por el cristianismo, que Oranyán arribó al convencimiento de que EL MAL ES LA LEY.
?Soy un negro africano, médico barbero y pordiosero ocasional ante la vieja Mezquita Aljama de Sevilla. Mi nombre es Oranyán, soy más pobre que las ratas del desierto, y en mi vejez he pasado hambre y todo tipo de humillaciones. Pero no me quejo de mi desgracia. Me apena más la maldad del hombre y mi convicción de que nunca se reformará. Por eso he escrito estos cuadernos, no para esta generación que desprecio, sino para alertar a las generaciones futuras sobre el insalvable declinar del hombre y de su creciente asociación con el mal. No creo en dioses. Tampoco en manipuladores, porque estoy hastiado de la mentira.
Y es que el hombre es malo e incorregible en su maldad.
Y es tal su propensión al mal, que lo pueden sumergir en agua hirviendo para corregir sus vicios y una vez seca sus vestiduras será peor que antes porque su corazón es duro como la roca. Lo pueden sepultar en la miseria, en la enfermedad y en la decepción y cuando salga será peor que antes porque su ley es el mal. Dicen que los dioses han enviado cientos de cataclismos para castigar su maldad, pero él no cambia.
Y pasa el tiempo y nada cambia.
Y todo es como antes; como lo ordenó la ciega naturaleza.
Y todo opera sobre la fuerza y la violencia.
Y así seguirá por siempre porque el mal es la ley..
