Daniel Huppenkothen contaba con un diario en el que escribía todas sus aventuras. De las cuales la más impresionante era que poseía una misteriosa viola que producía fenómenos fantásticos al ser tocada por él, y sólo por él.
Sin embargo, los poderes de aquel instrumento eran impredecibles y misteriosos, ya que tenía diferentes respuestas ante diversas situaciones. Se podía pensar que te hacía viajar en el tiempo, pero a la par, era capaz de manipular la materia y las circunstancias del entorno.
Larissa Promensano, una sagaz hechicera, fue capaz de encantar temporalmente la viola y provocar que Daniel perdiera el dominio sobre el instrumento, poniéndolo en graves dificultades.
Jacobo se sorprenderá en gran manera al darse cuenta que aun sin haber estudiado jamás, por alguna extraña razón...¡Entiende perfectamente el alemán!