Autor:
ismael diaz,
Vanessa Díaz
Ranking en Amazon: #1044191
(ayer: #1043895)
Páginas: 77
Descripción:
Una idea que cambió la historia y, después, al mundo.
Una idea que pone en su lugar a los actores: por un lado las tribus nativas del Continente del Sol, habitados por los Homo honoris y por el otro, las tribus depredadoras de los Homo rufianis, cuyo código moral se basa en la codicia, la traición y la mentira; lo que les permite sacar ventaja de todo con lo que se topan, ya sea personas, animales, flora y suelo; se adueña a como dé lugar de todo lo que puede explotar en su provecho sin el mínimo remordimiento o medida.
Tarde o temprano esto ocurrirá y bien que aprovecharon su pequeña ventaja en armas y experiencia en mentir, prometer y traicionar. Y la historia cuenta el resto: por buscar otra ruta para las indias y, creyendo que el mundo era plano, llegaron , para desgracia de este continente, y no dio otra, el Homo honoris fue sojuzgado,, esclavizado para sacar oro y plata, masacrado hasta casi el exterminio y despojado de cualquier riqueza que pudiera venderse, y lo peor de todo, los hijos de los Teutles de las Estrellas fueron contaminados con esa sangre con violaciones sistemáticas disfrazadas de ?matrimonios?.
Pero el Homo honoris siguió y sigue resistiendo el exterminio. No van a desaparecer; han pasado más de 500 años y continúa el acoso, despojo, asesinato, miseria y traición, y las tribus que sobreviven se niegan a desaparecer. Algo les dice que son superiores al invasor porque han mantenido su dualidad, el ser materia y espíritu y equilibrarse como ser humano. Son hijos de los teutles de las estrellas y saben que era y son superiores, tienen conocimientos que los Homo rufianis ni siquiera sueñan con entender. En la actualidad pueden estar en perfecta sintonía con la Tierra y sus corazones laten al ritmo de ella. Respetan la naturaleza, los animales, bosques y a las aguas, su vida es simple y sus alimentos sanos; sus dioses todavía están asociados a los del invasor, y sus rituales tienen dos dedicatorias. Resisten. Tienen a sus hijos siempre con ellos, ya sus ancianos los respeta y aman, y mueren en sus casas rodeados de cariño y cuidados y se ayudan mutuamente. No tienen miedo de estar solos consigo mismos por largos periodos, a pesar de los siglos de vida infame que los han hecho vivir.
En cambio los Homo rufianis, son exclusivamente materialistas, consumen todo lo que ven aunque los mate, lanzan a sus hijos a la calle nomás cumplir los 18 años. Asimismo los hijos los despojan de sus posesiones cuando envejecen y los refunden en asilos sin amos ni respeto. No pueden estar solos porque no se soportan ni a sí mismos, por eso buscan logares repletos, como cantinas, clubs, etc. No conocen el espíritu, se meten toda clase de sustancias adictivas con tal de evitar la soledad y verse obligados a mirar en sus interiores.
Los Homo honoris saben que tarde o temprano recuperarán sus tierras usurpadas del continente del Sol.
Los Homo rufianis no quieren tener hijos, por tanto, desaparecerán y devolverán al Continente del Sol a sus verdaderos dueños, las naciones de los Homo honoris.
Este libro es una fuerte dosis de ?esteroides anabólicos de patriotismo?, te ayudará a tener orgullo de raza, no te hace buscar figuras triunfantes con box, football, etc. Encontrarás en esta idea los asideros seguros y fuertes para hacer que la idea crezca, florezca y dé frutos y nos posicione de todo lo que siempre fue nuestro. Ellos son los aliens; ellos son los indocumentados ilegales; ellos son los inmigrantes indeseados a los que debemos deportar a sus tierras antes de que contaminen, destruyan y depreden Nuestro Continente, que ha resistido también a morir.
Ellos deben ser expulsados de nuestro Continente y entregar el territorio usurpado. Tenemos el derecho de vivir donde nos plazca en Nuestro Continente.
Una sola idea, que crece como un volcán y cambia el mundo.
Si tienes unas gotas de sangre de las tribus mencionadas en este libro, hervirán y te darán mucho orgullo del patriotismo verdadero, el de antes de la invasió
