Dicen que cuando a una mujer le ha faltado cariño desde pequeña, su alma se encierra en una coraza que es muy difícil resquebrajar. Julianna, en cambio, sigue siendo confiada y generosa. Extremadamente tímida, pero con gran corazón, busca sosiego en la cocina horneando deliciosos pasteles, en los libros, en la naturaleza, escapándose por la noche para ver las estrellas en el bosque de su Irlanda natal. Así descubre una noche a un joven herido, a quien salva la vida, curándolo como ha visto hacer a su padre. Los años pasan y esa niña regordeta se transforma en una belleza extraordinaria, sin ser consciente de ello. Tras la muerte de su padre, repudiada por sus hermanos, se ve empujada a buscar su independencia en Londres. Lo que no sabe es que hay alguien que la admira y la busca en secreto. Aquel joven al que salvó, hijo del conde de Worken, se siente en deuda con Julianna, a quien ha visto crecer y florecer hasta transformarse en toda una mujer.
A Cliff de Worken le resulta extremadamente fácil cautivar a la tímida e ingenua Julianna. Él, después de todo, es ahora uno de los solteros más codiciados, atractivo y arrebatador. Pero su ímpetu arrolla y confunde a la bella joven, que no puede entender que alguien se fije en ella. Aun dudando de las intenciones de Cliff, Julianna se verá envuelta en una peligrosa historia. ¿Por qué confía en ese hombre con sonrisa de depredador? ¿Por qué no puede resistirse, cuando todos los indicios le dicen que se aleje de él? Pero el destino le tiene preparadas muchas pruebas y aventuras que deberá superar antes de obtener la respuesta?